Cuando la vida parece culo y quería ser pandero

­Nos dicen en estos dias que una mujer, por el sólo hecho de defender a sus hijos, ha de ir a la cárcel y perderá cualquier derecho sobre ellos. Un comisario de exposicion de arte agrede a una artista y quienes lo denuncian, acabarán ante los tribunales por su denuncia.  Un señor presuntamente homófobo,  presuntamente reaccionario, presuntamente facha, quiere que las mujeres perdamos nuestro libre albedrio. En un mundo de esclavas , no decidamos ya cuando ser o no ser madres. Nos dijeron que la vida era una tómbola de luz y de color, y que tocarnos el culo era sobar un pandero que daba buen sonido. Y al final, la vida se nos ha hecho culo y nos han arreado en el pandero como si no hubiese mañana.

En tus manos está mujer, que sigan con la azotaina o pararla. Caminar o reventar.